Javier Moreno vive sus años de infancia y juventud en la Comunidad Valenciana, conociendo muy de cerca una vida musical que se extiende por todos los pueblos de esta región. Comienza sus estudios musicales de manera particular con Carmen Avinent, ingresando posteriormente en el Conservatorio Profesional de Castellón donde termina sus estudios de grado medio con Isabel Martín con las más altas calificaciones. Complementa con éxito la formación del instrumento realizando estudios de armonía, contrapunto y fuga en los conservatorios de Castellón y Valencia, obteniendo el título de Profesor Superior de Solfeo y de Teoría de la Música, Transposición y Acompañamiento. Concluye sus estudios de Grado Superior de piano con la pianista Marisa Blanes y realiza posteriormente estudios de postgrado con Albert Nieto, obteniendo la titulación de especialista universitario así como el DEA (Diploma de Estudios Avanzados) y complementando su formación con diversos cursos de análisis musical, de musicología, de improvisación, de música de cámara y de técnica e interpretación pianística con profesores de la talla de István Gulyás (profesor de la Academia “Franz Liszt” de Budapest), Olga Tverskaya, Brenno Ambrosini, Luis Rego, Luca Chiantore, Arpad Bodò y Carles Santos.

Su labor concertística le lleva a actuar como solista, interpretando, entre otros, el concierto para piano y orquesta en Sol Mayor de Maurice Ravel en el auditorio de Alcora (Castellón) y el concierto para piano y orquesta Nº 8 de Mozart en el auditorio de Castellón, ambos junto a la banda sinfónica de Alcora dirigida por Emilio Mallol, y también como músico de cámara formando dúo junto al violonchelista Javier Bertomeu, el violinista Miguel Román, la soprano Arancha Martínez y la pianista Ana de la Herrán por toda la geografía española.

Después de una larga trayectoria musical que desarrolla en todos los campos se lanza a la creación de su propia escuela en Torrelodones, donde plasma todos los conocimientos adquiridos junto a un “conjunto perfecto de profesores” a quienes dirige y a quienes impulsa para que sepan transmitir la música como lenguaje universal y complementario de cualquier actividad, conociendo muy bien las necesidades de todo tipo de alumnos, quienes la aprecian sinceramente y quienes respiran “ese algo especial” que tiene una academia distinta a las demás. Torremusicalia es ya para siempre, desde su dirección, “más que una academia”.